Mi viejo y querido Rio Lujan, seguramente a través de su historia, a tenido muchos personajes que de alguna manera han contribuido a darle algo de identidad al lugar.

Uno de esos personajes hizo de la bohemia, y su amor por las musas, su estilo de vida nacido cerca del antiguo almacén de la familia Coletta, a 5 kilómetros de panamericana rumbo a Los Cardales, el 8 de febrero de 1898, Don Ricardo Jesús Burgueño, hijo natural de Teofila Burgueño quien años mas tarde seria desposada por Zenón San Martín, desde muy pequeño demostró una gran facilidad para cultivar el canto repentista,recordando su nacimiento aquí en Rio Lujan decía ;Yo nací como los teros/ a la orilla de un bañado/y de ese modo me he criado/descalzo y mostrando el cuero.

Luego con su madre y padrastro, se traslado a vivir a Campana y comenzó a ser conocido con el nombre de Ricardo San Martín, pero nunca olvido sus viejos pagos de Rio Lujan, donde pasaba largas temporadas en el tambo de los hermanos Rodríguez o en mi casa.

Ya siendo mayorcito junto a un tío abuelo mio llamado Luís González a quien llamaban

"Cinchón de dos vueltas" por su estatura comenzó sus andanzas de recitador, pero siempre haciendo letras suyas.

De esta manera y como autodidacto, se fue forjando el futuro recitador que fuera figura obligada de cuanta reunión hubiera, en carreras de sortija, despedidas de soltero, casamientos, cumpleaños, o reuniones de amigos donde se cultivara el canto criollo allí el viejo Ricardo como lo llamábamos los mas jovenes, seguramente se constituía en la figura principal, y con solamente aportarle algunos datos improvisaba

Al novio, o cumpleañero, o a quien fuera.

Siendo aun joven, comenzó a trabajar en una refinería de petróleo de Campana, luego contrae enlace con Josefa Rosalía Fernández, de esa unión nacen seis hijos: Italo Ricardo, Nora, Emilio, Juana, yJosefa.

Su rancho de la avenida Ameghino, era punto de reunión de cuanto bohemio y amante de las musas creadoras, quisiera pasar un rato escuchando las últimas letras de Ricardo para lo que siempre estaba dispuesto.

En su dilatada vida artística de mas de cincuenta años, jamas quiso que le grabaran nada, como tampoco dejo casi nada escrito, para quienes no lo conocieron pudiera hoy apreciar su aptitudes.

Muchas fueron las invitaciones para llevarlo a emisoras radiales capitalinas a lo que tampoco accedió, los pocos versos que del viejo Ricardo han quedado en la memoria de los que fuimos sus amigos, como el que le dedicara "Al gaucho Polonio Ahumada",

o "Las yerras fueron Ansina", algunos versos he reconstruido a través de papeles con algunas estrofas que me brindo su nieta, es que el viejo Ricardo, pensaba tal vez que el arte es algo que nace del alma, y por esa misma razón no se puede vender, porque seria vender el alma.

El dia 14 de febrero de 1976, el viejo Ricardo, callo para siempre aquí en la tierra, porque esta vez si acepto el envite, en el que para un fogón en el que seguramente participarían Fernando Ochoa, Néstor Feria, Martin Castro, Santiago Roca, Rogelio Araya, y el viejo Pancho, entre otros, quienes los habrán recibido con las tranqueras abiertas.

Hace algún tiempo dos amigos de los tantos que dejo el viejo Ricardo le compusieron 4 décimas de las cuales vamos a citar la primera, estos amigos son Miguel Mario Maro, y Alejo González Chuquel (Tito)

Voy a tomar un amargo / después ensillare el oscuro/ porque estoy casi seguro/ que este viaje va a ser largo/ asi me hablaba Ricardo/ con su voz muy dolorida/Pensando ya que la vida/ le iba llegando a su fin/ Don Ricardo San Martín/ hoy lloramos tu partida

En el próximo capitulo seguiremos con estas historias de mi viejo Rio Lujan

bolzantangocol@ubbi.com